Esta pieza datada en el período romano podemos catalogarla como una obra singular. Es una estela del tipo cintrada en su parte superior. Representa a un hombre vestido al uso romano, con larga túnica blanca y cabellos cortos. Sujeta en su mano derecha una alta cesta de ofrendas; la otra mano está al lado de su cuerpo. Lo acompañan los dioses funerarios egipcios Anubis, a la izquierda, y Osiris a la derecha, ambos de perfil y representados a través de la iconografía egipcia. Encima de la escena aparece el disco solar. En la parte superior izquierda del difunto hay una pequeña figura humana con los brazos alzados que representa al ka del muerto. La estela aún conserva rasgos de la policromía original. La gran importancia de esta estela radica en poder ser considerada un testimonio de la gran repercusión de la cultura egipcia en el mundo greco-romano y un ejemplo de la asimilación de rasgos de su religión y rituales mortuorios en el mundo clásico.